La lucha contra la violencia hacia la mujer requiere de un pacto social que de preeminencia a las necesidades e intereses de las mujeres y las haga capaces de defenderse, fortaleciendo saberes y condiciones, pero fundamentalmente respetando sus derechos humanos.
Mi Gobierno ha decidido que la prevención sea una prioridad clave para abordar de raíz las causas profundas de los conflictos, y la intolerancia. Debemos desterrar los estereotipos de género y las actitudes negativas, adoptar y aplicar leyes para prevenir y poner fin a la discriminación y hacer frente a los comportamientos violentos.Todos tenemos un papel que desempeñar y les insto a cumplir el que les corresponde. Den la espalda a la división y al odio; defiendan lo que es correcto y justo.
Alcancemos juntos un Paraguay sin violencia, donde reinen la justicia, la paz y la prosperidad duradera para todos y todas.
Fuente: Dirección de Información Presidencial